(Desde el Café, donde se arregla el mundo. Foto de Eduardo Méndez Gallardo)
Martínez Campos, 13/III/014
GUIA
MOSAICO
Silviano Martínez Campos
LA PIEDAD, 13 de Marzo.- LA PRESIDENCIA MUNICIPAL acaba de revelar datos estadísticos sobre La Piedad, mediante los cuales nuestra ciudad (y municipio) no quedan tan mal parados en relación con otros municipios de Michoacán y acaso del país. Cifras y estadísticas por sí solos exponen comparativamente cómo es ahora esta población por lo cual, según se ve, hemos avanzados conforme a los criterios aceptados para hacer estas comparaciones. El único desequilibrio que capto a vuela pájaro, es el de la población concentrada en gran parte aquí, en la cabecera municipal, en relación con el resto de las comunidades; pero ¡Oh consuelo!, eso se da en todas partes. Me parece adecuado y revelador el enfoque, pero sólo les faltó decir que este año cumplo 25 (veinticinco años) de residir en esta querida ciudad de mi región, ambas el ombligo del mundo, por si faltara poco, je, je. ME PERMITO HACER una referencia pues, a mi propia persona, porque la mera verdad, aparte de las estadísticas, el mundo se ve además a través de la propia perspectiva, por algo somos cada uno también, el ombligo del mundo Así es que recuerdo, aun cuando un poco desteñidos en la memoria, aquellos viajes desde Ziquítaro, mi ombligo del mundo primero, allá por principios de los cuarenta, primero en La Joven Bella, luego en El Ciclón y en El Amor Chiquito, transportes de aquellos de canastilla donde “ambos tres” corrían en la brecha, a velocidades “supersónicas”, por el ruido, pero era normal en tiempos en que aún no se aceleraba el mundo. PARA MÍ ERA un misterio al percibir desde poca distancia, aquella gran cantidad de agua que decían era del río. Llegué luego a saber que tal era la abundancia de peces, bagre y carpa que se pescaba en sus riberas y luego los pescadores, con enormes pescados al hombro, recorrían los barrios al grito mañanero cotidiano, de ¡Ay carpas!. Pero ahora el Río Lerma está muerto, y no es consuelo decir que en toda su cuenca y no es consuelo decir que hay otros ríos, aquí, y en todas partes, si no muertos, agonizantes. DE TODAS MANERAS, La Piedad creció y creció, en mi experiencia. La actividad comercial organizada, era de pocos: ahora están establecidas tiendas de autoservicio de categoría, funcionan sus dos mercados. La ciudad era pequeña, un pueblito según apreciaban algunos habitantes, con pocos barrios centrales: el centro propiamente dicho, La Purísima, Perros Bravos, El Santuario, Las Colonias (El Mercadito); ahora se extiende por los cuatro puntos cardinales. Los templos del Señor de la Piedad, de Guadalupe y luego el de El Carmen y ahora capillas en diversos lugares y, desde luego, más parroquias. La famosa escuela secundaria Rafael Reyes, en su tiempo considerada lo mejor en estructura educativa. Continúa valiosa, pero ahora abundan preparatorias, sucursales de universidades foráneas y sus dos instituciones de nivel superior, El Instituto Tecnológico de La Piedad y la UNIVA, La Universidad del Valle de Atemajac. Una inmensa y bien entrelazada red de carreteras que comunican hacia cualquier horizonte del país. El tren (ferrocarril) de mi infancia, a través del cual viajaba de vez en cuando, en mis años escolares hacia la ciudad de México, a las once de la noche o volvía, a las siete de la mañana, quedó en el recuerdo. Carreteras ahora que enlazan con modernas autopistas. La Piedad, pues, ha cambiado y ojalá sea para bien, en estos tiempos tan acelerados. LOS “NUMERALIA” DE los censos, dicen que 99,576 piedadenses habitan en el municipio (o sea 2.3 de cada 100 michoacanos, son piedadenses. De ellos 83,323 viven en la cabecera municipal y el resto en las comunidades rurales. De todos sus habitantes, 52.3 por ciento de los piedadenses son mujeres, el resto son hombres. Esto equivale a un total de 52 mil 84 mujeres y 47 mil 492 varones. En 2010, el municipio de La Piedad contaba con 194 planteles educativos. De los cuales 71 son escuelas preescolares, 89 primarias y 22 secundarias. Además, tenía 11 bachilleratos, una escuela de profesional técnico y cinco escuelas de formación para el trabajo. Las unidades médicas en el municipio eran 16 en el año 2010. Estos centros de atención hospitalaria contaban con 226 personas como personal médico, un promedio de 14.1 doctores por unidad, el promedio estatal es de 5.6. HASTA AQUÍ, ALGUNOS de los datos oficiales, conforme a los censos. Naturalmente, ni aquí, ni en ninguna parte, todo es miel sobre hojuelas. Habría de verse qué nos dirían datos relativos a población flotante, emigración hacia los USA, desocupación laboral, cómo andan las cifras de la violencia, problemas sociales como delincuencia, divorcios, hogares disfuncionales por aquello de ausencia (por razones laborales en todo caso), de los jefes de familia que trabajan en el extranjero. La Piedad es conurbada con amplia zona del municipio de Pénjamo, Guanajuato. Se visualiza ya la región como Zona Metropolitana, lo que augura otra índole de cambios, además. (www.miregionmichoacana.wordpress.com )
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